

PENSAMIENTOS: VIVIR SIN CARNE
Su nombre es Regina Gallegos: mexicana de 24 años, residente en Los Ángeles, CA; fotógrafa profesional, artista en las artes circenses y animalista de corazón. Hoy comparte con nosotros en Green Animal su experiencia como vegana.
¿Que te hizo ser vegana?
Inicie a la edad de 19 años por el amor que siento a todos los animales. En específico vi un video de la industria ganadera y fue algo muy estresante para mi... sentí mucha impotencia. A partir de ahí empecé a investigar más acerca del uso de los animales como bienes materiales. Descubrí que los explotamos en todos los sentidos y a muchísimas especies, ya sea por experimentos, contaminación, comida o vestimenta.
Me hice consciente de todo el daño que estaba ocasionando y decidí parar.
El veganismo me acogió y más allá de ser un tipo de dieta, se volvió para mi un estilo de vida que me da tranquilidad espiritual.
¿Hiciste el cambio enseguida o tuviste lo que muchos llaman transición?
¿Que evaluación puedes hacer acerca de llevar una ética vegana ahora y la que llevabas antes?
Mi “transición” duró unos pocos meses. Muy pocos; creo que no más de tres.
Tenía prisa. Una vez tomé la decisión ya no podía comer sin remordimientos
nada de procedencia animal. Y solo lo hacía porque quería alimentarme con lo
necesario hasta tener los suficientes conocimientos para suplirlos. Por suerte
en internet hay profusa información, que por cierto hay que intentar depurar, ya
que algunos te dan algunas ideas, que decir que son absurdas es poco.
A veces me siento frustrado de no haber sido capaz de ver antes lo que estaba
ocurriendo y más cuando veo gente que es vegana mucho más joven que yo.
Aparte de eso, veo que hay mucho camino por recorrer. Será más difícil de
solucionar que por ejemplo la esclavitud o el derecho a voto de las mujeres. Si
fue difícil en esos casos, en los que estaban involucrados seres humanos, más
lo será con especies diferentes. Los humanos somos especistas por
naturaleza. Va en nuestra cultura.
¿Cómo notas al veganismo actualmente a cuando tú comenzaste?
Antes de ser vegana, no tenía mucha idea de que existiera esa opción, solo sabía
de los vegetarianos y cuando lo escuché por primera vez pensé que era lo mismo. Y ni idea de a qué nivel se movían los que lo eran.
Los prejuicios que tenía entonces, pues realmente creo que nunca los tuve. Siempre he admirado a la gente que lleva un estilo de vida saludable o que ama a los animales.
Sí puedo comparar el desarrollo que he visto en el mundo del veganismo desde
que me inicié. Hay más comercios, más establecimientos de hostelería, me
llega más información sobre el tema…. creo que cada vez hay más gente que
se conciencia.

¿Cómo ha sido la respuesta y actitudes por parte de tu entorno, tanto familiar, como amistades frente a este cambio?
Lo más difícil no fue que mi familia lo aceptara, mis papás y mi hermana, fue hacer que todos se adaptasen a mi nuevo ritmo de vida. Comida especial, lugares para salir especiales, todo especial solo por mi. Al inicio les costó trabajo, actualmente mi hermana está empezando a reducir su consumo en productos de origen animal. Eso me hace muy feliz.
Los comentarios de los que
están fuera de mi entorno más directo, francamente no me afectan. Intento
hacer una pequeña explicación, pero según sea la respuesta que perciba, paso
del tema.
¿Cual es el mensaje que quieres dejar en este mundo?
Un mensaje de amor y respeto por todo lo que somos y de todo lo que nos rodeamos.
Estamos en este planeta fugazmente como para llenarnos de odio o lastimar a otras especies. Todos formamos parte de un todo, todos somos uno en este pequeño punto azul en el universo, sin embargo creo que un pequeño gesto de amor, de cuidado y de respeto puede cambiar vidas.